Hola,
Aprendí a sumar y me pareció genial, todo era más.
Después, llegó la resta y, bueno, eso de ver que podía perder no me hizo tanta gracia.
Luego, la multiplicación fue un espectáculo, una auténtica maravilla.
Pero cuando apareció la división… ya no me gustó ni un pelo, y decidí que las matemáticas no eran lo mío.
Esto, aunque parezca simple, para mi encierra una gran verdad sobre los negocios y la vida en general.
Sumar y multiplicar son las acciones que nos llenan de satisfacción y nos hacen crecer.
Añadir valor, aumentar nuestras capacidades y expandir nuestras oportunidades son aspectos que todos disfrutamos y buscamos.
En nuestros negocios, sumar puede significar añadir nuevos clientes, mejorar nuestras habilidades o incorporar talento a nuestro equipo.
Cada pequeña adición contribuye al crecimiento y al éxito.
La suma es positiva, es un avance constante que, aunque parezca pequeño, tiene un impacto significativo a largo plazo.
Multiplicar, por otro lado, es aún más emocionante.
Cuando encontramos una fórmula que funciona y la escalamos, los resultados pueden ser sorprendentes.
Multiplicar ingresos, multiplicar el alcance de nuestro producto, multiplicar nuestras conexiones…
Es en este momento cuando siento que todo el esfuerzo vale la pena, que estoy en el camino correcto y que las posibilidades son infinitas.
Pero no todo es sumar y multiplicar.
A veces, la vida y los negocios nos enfrentan a la resta y la división.
Restar puede implicar perder clientes, reducir gastos o tomar decisiones difíciles que afectan a nuestro equipo.
Aunque necesarias, estas acciones pueden resultar incomodas
Dividir puede ser aún más complejo.
Dividir recursos, dividir el tiempo entre múltiples responsabilidades o dividir el enfoque en varios proyectos puede dispersar nuestra energía y dificultar el progreso.
La división, con su naturaleza fraccionaria, puede hacernos sentir que estamos perdiendo más de lo que ganamos.
Pero y si te digo que aquí está la clave….
Entender que tanto sumar y multiplicar como restar y dividir son partes esenciales de nuestro viaje.
Aprende a navegar entre ellas, es lo que nos permite avanzar y prosperar.
Así que, en lugar de temer a las restas y divisiones, ¿y si las vemos como oportunidades para simplificar, enfocar y fortalecer nuestras bases?
Cada resta puede ser una oportunidad para eliminar lo innecesario y cada división una oportunidad para reestructurar y mejorar
¿Cómo puedes aplicar la suma y la multiplicación en tu vida o negocio hoy?
¿Y cómo puedes enfrentar las restas y divisiones de manera que te fortalezcan en lugar de desanimarte?
ahora es cuando te reto
¿Estás listo para sumar y multiplicar tu éxito?